29 sept 2009

Halo uno. Un halo.


Se acaba el mes de septiembre y en este principio otoñal me dispongo a lanzar al océano, a este océano global, fragmentos de escritos que han ido apareciendo tras mi pluma, retazos de imágenes que se han quedado cinceladas en la memoria, algún que otro pensamiento.
Para cualquiera que halle un momento, o que quiera detenerse... Bienvenido. Y lo inauguro con un poema inédito, como todo lo que he escrito hasta ahora. Un poema que habla del poder del humo que vuela hacia las nubes y se difumina en el vacío. A veces el tabaco no mata.



CIGARRILLO A MEDIAS


Lo he fumado contigo
lanzándote peniques
en cada muerte a plazos
para que se cayesen
justo aquí a mi lado
todos los pensamientos
que en la honda calada
me hacías en regalo.

Lo he fumado contigo
aspirándote a besos
como sólo yo sé
que te puedo beber.

Un penique te doy.
Dame tu pensamiento.
Dime si es de hoy,
dime si ahora somos,
qué será de mañana,
qué si mi sangre triste
ya no me resucita.

Lo he fumado contigo.




6 comentarios:

Sebastián Mondéjar dijo...

Esto..., ejem..., ¿me das una calada?

Bienvenida, tú, Isabel, y gracias por invitarme a compartir estos halos de azul.

El tabaco no sólo a veces no mata, sino que nos hace revivir. Casualmente, hace unos días me preguntaron en una entrevista si fumaba y respondí que sí, pero que del acto de fumar lo que más me gusta es el movimiento del humo del cigarrillo, porque es como una metáfora del pensamiento.

Y de pronto he recordado esta copla que escribí hace años:

"Cuando me fumo un cigarro
siento que la vida es humo,
fuego que se va apagando."

Pero a ti, Isabel, aún te queda tabaco para rato. Gracias por compartirlo.

Abrazos de humo.

Ferran dijo...

Es una poesía preciosa y cargada de personalidad. Me gusta muchísimo. Detrás de tí hay una mujer con humo, gotas de lluvia y contraluces, eso es tener los ovarios bien puestos, sigue recorriendo la vida que yo te aguardo, vale? ;) Bss

Anónimo dijo...

Ademas de buena profesora eres buena poetisa? Hace ya dias que no contacto contigo pero no por eso pierdo las ganas sabes!! Un beso enorme para ti Isabel!

Fdo: Tu antiguo alumno, Paco.

Pedro López Martínez dijo...

PRIMERA JACULATORIA

Aunque las cajetillas de tabaco llevan un letrero archiconocido advirtiendo de los horrrrrrrrrrrrrrrores del vicio, yo siempre he pensado (y lo defenderé hasta el cáncer) que en ellas cabe un cinco o un diez por ciento (uno o dos cigarrillos)que elude la noción de vicio y que triunfan en otro ámbito (socio-emocional, inspirador de ideas, sin duda placentero) seguramente irrenunciable.


SEGUNDA JACULATORIA

Mi profesor de autoescuela me decía que no es el coche el que tiene que llevarme a mí, sino que soy yo quien siempre tiene que llevar el coche. Suspendí varios exámenes... Yo ahora te digo a ti (que no soy profesor de blogs, pero alguna experiencia tengo)que te apliques el consejo y que no dejes que el blog te lleve y domine el camino blogosférico que inicias, sino que seas tú quien lo lleve con mano segura y corazón aventurero.


TERCERA JACULATORIA

El poema, aparte de estar bien medido, dice más, lo cual es mucho decir.

German dijo...

Bienvenida al mundo Blogero niña. Un placer leerte y un orgullo estar en tus enlaces.
Aunque el tabaco mata, a veces consigue expulsar las penas que se quedan pegadas en el papel con cada calada y mandarlas tan lejos como el humo pueda llegar. Un besazo!!

Isabel Martínez Llorente dijo...

Querido Sebastián... ejem... gracias a ti. Es un honor contar con tu presencia por estos lares y una alegría sincera. ¡Comparto la cajetilla entera en encuentros venideros! Para enmarañarnos en pensamientos y divagaciones varias por las esquinas del humo. Hablas en tu copla de la vida como fuego que se apaga, yo prefiero sentirla como oxígeno que prende. Y en el ir y venir de tu fuego a mi oxígeno se va pasando el tiempo, ese canalla que no deja de correr.

Ferran, los contraluces hacen que aparezcan juegos de sombras y claridades.

Paco, mi aventajado alumno universitario, ¡tú no fumes que eres un buen deportista en tu sitio y esto va de metáforas de nefelibatas!

Pedro, este corazón aventurero lee tus jaculatorias, acepta consejos, se deja guiar y sí, me alegra que seas tú, poeta, quien vea que detrás del poema bien medido hay impresiones que quedan latentes, o sugeridas, o en silencio. Claro que sí. Gracias por compartir este halo de azul, querido compañero.

Germán...ahí vamos, arrojando palabras entre colilla y colilla.

Un abrazo y bienvenidos.
(El abrazo se hace extensivo a todos los que habéis estado leyendo este intento de poema...o me habéis contado vuestras casualidades con la foto de la hoja..o vuestras opiniones del blog... Así que ¡el abrazo es grande!)